Si nuestro perro tiene pulgas, algunos de los síntomas que veremos en él serán: picor intenso, enrojecimiento, calvas e inquietud. Las pulgas son unos pequeños y molestos parásitos que deben ser erradicados de inmediato.  Las pulgas se alimentan de la sangre de su huésped y depositan huevos en los entornos en los que se mueve el perro. Por tanto, es indispensable desinfectar la casa de manera profunda y, evidentemente, tratar a nuestro perro: pero ¿cómo deshacernos de las pulgas en el perro?

Cómo deshacernos de las pulgas

No todo el mundo sabe que las pulgas sobreviven durante todo el año -incluso a bajas temperaturas-: por tanto, la prevención es indispensable durante todo el año. Si nos damos cuenta de que las pulgas están atacando a nuestro perro, debemos ponernos manos a la obra de manera inmediata: después de haber mordido al animal, se reproducen y liberan huevos que pasan por diversas fases vitales hasta convertirse ellas mismas en adultas. En este momento, serán capaces por sí mismas de infestar a nuevos y desafortunados huéspedes de los que se alimentarán.  Las pulgas son muy pequeñas y difíciles de identificar. Sin embargo, es posible identificar los excrementos que liberan sobre el animal, ya que se trata de pequeñas bolitas marrones.  Si se los quitamos con una servilleta blanca y los humedecemos con un poco de agua, veremos una mancha de color rojo que indicará la presencia de sangre. 

Cómo deshacernos de las pulgas en nuestro perro

Para eliminar las pulgas en el perro, debemos bañarlo de inmediato con un champú antiparasitario, el primer producto que necesitaremos para eliminar las pulgas. Debemos darle al perro un baño tibio, frotando y masajeando el producto por todo su cuerpo. Tras aclarar el champú, le tendremos que pasar un peine de dientes apretados por todo el pelo para poder quitarle pulgas y huevos.  Debemos secar bien al perro y aplicarle un buen tratamiento antiparasitario pasados unos días para que esté protegido. El tratamiento antiparasitario debe aplicarse de manera constante durante todo el año. Podemos elegir un tratamiento bien en gotas o bien en ampollas. Se trata generalmente de un producto líquido que se aplica en un solo lugar y que brinda al perro protección durante todo un mes. Otra buena alternativa es un collar antipulgas, que libera gradualmente ingredientes activos que sirven para repeler pulgas, así como otros ingredientes antiparasitarios. También podemos optar por productos naturales disponibles tanto con acción farmacológica, gracias a la presencia de una serie de principios activos sintéticos o por el uso de sustancias naturales.